Hoy he querido rescatar una de las publicaciones de mi blog titulada <<La creatividad en la etapa infantil. “la experimentación y el juego son las vías para hacer unos
niños más creativos y mediante éstos tienen la posibilidad de recortar un
trocito del mundo y manipularlo”
En torno al año, sorprendemos al bebé
imitándonos, dando de comer a un muñeco o peinándose asimismo u a otro.
Posteriormente, se va desarrollando el Juego
Simbólico que le permite sumergirse en un mundo donde puede ser el
protagonista y convertirse en Superman o maestro para luego volver a la
realidad. Este juego va evolucionando hasta compartirlo con otros. De un juego
individual pasa a un Juego Paralelo,
en el que juega al lado de otros pero sin interactuar con ellos. Es a partir de
los 3 años cuando se establece un Juego
en pareja, y donde ya la evolución es vertiginosa.
Analizando estas etapas, podemos ver
como el juego es imprescindible para el desarrollo cognitivo del niño de tal
forma que un niño que no juega no puede avanzar intelectualmente al igual que favorece la socialización al relacionarse con los demás. Sin duda, es la mejor
manera de conocerse así mismo, de saber sus capacidades y limitaciones y de
intentar superar dificultades y amoldarse a las decisiones de los demás. De
esta forma, es un medio para desarrollar la voluntad, la capacidad de
autodominio y la conciencia de uno mismo. Le ayuda a expresar sus emociones positivas
y negativas a los que viven con él.
Mediante el juego, los niños
comprenden el funcionamiento del mundo, aprenden a gestionar sus emociones
positivas y negativas y a socializarse a conocer sus capacidades y
limitaciones, es decir, a adaptarse a la vida.
Por estos motivos, creo que el juego
debe tener un lugar en las vidas de nuestros alumnos tanto a nivel escolar como
a nivel familiar. A nivel escolar, a parte de transmitir lo “académico” debemos
mirar al alumno en todas las dimensiones y atender a las necesidades derivadas
de las mismas siendo una de ellas EL
DERECHO A SER FELIZ EN EL AULA, A QUE LA MAESTRA SE EMOCIONE Y LE LLEVE A
EMOCIONARSE CON LO QUE LE ENSEÑAN, EL DERECHO A APRENDER DESDE EL MOVIMIENTO Y
DESDE EL JUEGO. En este sentido, hay
que tener cuidado con no sólo permitirles juego libre (del cual aprenden en
todas sus dimensiones y permite, con un buen trabajo del tutor –ayudándoles por
ejemplo en la resolución de conflictos que van surgiendo-, crear un clima de
respeto y tolerancia hacia el otro). Digo que no sólo juego libre porque
mediante el juego por rincones podemos aprovechar para juegos que tengan que
ver con el proyecto (a parte del soporte o no material de la editorial), juegos
para desarrollar la lógico-matemática o juegos para el desarrollo de la
lectoescritura porque las letras y los números pueden ser muy divertidas. No olvidemos que los niños son esponjas dispuestas a absorber lo que se les ofrece (no desde la imposición sino encontrando el momento oportuno).
A nivel familiar, como padres debemos
potenciar el juego con objetos y
acciones de la vida cotidiana, con construcciones, con material de juego
simbólico que le invite a imaginar y
proyecte más allá de apagarse durante horas con móviles,, tablets, consolas,
etc que le llevan a estar consigo mismo y no le permiten desarrollarse en otros ámbitos
fundamentales como el cognitivo, motórico, social o afectivo. No hagamos
necesario lo que no es porque antes no existían las nuevas tecnologías y
vivíamos felices disfrutando en una época con menor consumismo. Un ratito ayuda
mucho perjudica. Juguemos más con ellos, permitámosles ser mamás o papás, astronautas,
cantantes, futbolistas… porque la magia de la niñez debe ser disfrutada y
vuela. PERMITÁMOSLES JUGAR, PERMITÁMOSLES SER NIÑOS PORQUE JUGAR NO ES UN LUJO, ES UNA NECESIDAD pero también PERMITÁMOSLES APRENDER.
No hay comentarios:
Publicar un comentario